martes, 15 de diciembre de 2009

UNSENT III : Querido Sr. Rotisopo








UNSENT II: Querido Sr. Piojoso




UNSENT I

Esta canción de Alanis Morissette me gusta bastante. Se llama Unsent y es de su disco "Supposed Formed Infatuation Junkie". A modo de carta, en cada estrofa, se dirige a un hombre de su vida. Va explicando que ha significado para ella cada uno de ellos. Son cartas que no ha enviado, palabras que no ha dicho.









sábado, 12 de diciembre de 2009

La "dichosa pregunta"

¿Quién no disfruta con un reencuentro?. Una amiga que no ves desde hace mucho tiempo, una llamada de alguien al que no escuchas a menudo, un e-mail de aquel amigo tuyo que está lejos por motivos de trabajo, esos miembros de la familia de los que no disfrutas normalmente. Pues sí señores, los reencuentros son entrañables. Hasta el momento que surge la "dichosa pregunta".

"¿Cómo estás? ¡Cúanto tiempo sin verte!"

"Es verdad. Yo bien, ¿y tú?"

"Pues aquí estamos, estudiando, trabajando de vez en cuando..."
Y ahora viene... respira, respira: "Y qué, ¿te has echado algún amiguito?, ¿tienes novio ya?"

"No. Oye, ¿sabes qué? Juego en un equipillo de fútbol sala"

"¿Si?, pero una chica que juega al fútbol, eso no les gustará mucho a los chicos, ¿no?"

"Nose. ¡Ah!, y en abril me voy a jugar una competición nacional de fútbol a Valencia, con todos los estudiantes de mi facultad"

"¿Si?, anda, pues entonces irán muchos compañeros tuyos, ¿no?"
"Imagino. Bueno, ¿y tú?"

" Mira, no te preocupes que ya llegará, eso llega sólo. Además, si no tienes nada es porque no quieres"

......

Es en estos momentos de la conversación donde el reencuentro pierde su encanto, y la alegría que teníaa por ver de nuevo a esa (esas) persona se vuelve una profunda depresión, porque me recuerdan que soy una chavala de 24 años, soltera, que no ha tenido nada estable, ni factible, ni especial en toda mi vida. Porque es en ese momento cuando me aparece en flashes todos mis "fracasitos". ¡Qué manera de arruinarte el día!
Por cierto esto me acaba de de dar una idea para una saga de post. Jajajaja....


jueves, 10 de diciembre de 2009

La Sra. del Cuarto

Escucho la canción de "Quiero ser" de Amaia, es una canción bonita, me gusta el sonido de la guitarra al empezar: "¡Otra vez no!, es el despertador". Me he vuelto a quedar dormida.
Salto de la cama. Me visto:
-"Este pantalón no, no pega con estas botas".
-"¡Jolín!, ¿dónde está mi camiseta azul?".

Me bebo el café de un sorbo y salgo corriendo con la chaqueta y la bufanda medio puestas; ¡siempre voy tarde!. LLego a la puerta del portal y justo cuando voy a abrirla escucho a mis espaldas el sonido de la puerta del ascensor. Rezo sin mirar: " La Sra. del Cuarto, !no por favor¡".

La Sra. del Cuarto es una mujer mayor que vive sola y su único entretenimiento es bajar a la calle a tirar al contenedor la basura varias veces al día. Tengo varias hipótesis, una es que tiene un síndrome, aún por descubrir, totalmente opuesto al de Diógenes. La otra, que no tiene cubo de basura ni papeleras en su casa. Se come un plátano, baja y tira la piel; se toma una cerveza (porque le gustan bastante, doy fe), baja y tira la botella; y así continuamente. Bueno a excepción del domingo. Un día me entrecogió en el ascensor y me comentó que los domingos no le gustaba salir a la calle porque no había nadie, ni el gimnasio estaba abierto, ni el Pan de Leña, ni el Bar de Lolo, y le da da miedo. Aunque la hipótesis con la que me quedo es con la de que es un poquito bastante alcahueta. Es de las típicas vecinas que si te ven venir se esperan en la puerta para subir contigo en el ascensor. Y ella no pierde el tiempo hablando del tiempo (valga la redundancia), ella va directamente al grano, y te pregunta de donde vienes, por las compañeras de piso, por el propietario... vamos, de lo que vaya surgiendo.

Acabo echando la vista atrás, y efectivamente: La Sra. del Cuarto con una bolsita pequeña con un cartón de leche y un vasito de danone vacios.

-"Niña agárrame la puerta que ya voy"
-"Buenos días señora"

¡Cuánta vitalidad tan temprano, por dios! Seguro que no tendrá nada que hacer, ¿para qué se levantará a estas horas? Si ahora tampoco hay nadie por la calle, ¿no le da miedo?

-"¡Ea! Ya vas para clase, ¿no?" "¡Uyy! ¡Con el frío que hace!"
-"Si que hace frío, ya era hora que llegará"

Si hace frío, ¿por qué no se queda en casita?, o mejor aún, acostada.

-"Pues hoy no está la Sra. Presidenta limpiando las escaleras"

La Sra. Presidenta es otro entrañable personaje del que hablaré otro día sin duda. Los días en los que la Sra. Presidenta está limpiando las escaleras son aquellos con los que corro más suerte, ya que la Sra. del Cuarto se para con ella para ponerle al día de qué vecino ha llegado más tarde, o quién a ido a visitar y a quién.

-"¡Uish! Cómo me duelen las piernas, cada vez me cuesta más andar"

Pues si le cuesta andar, cómprese un cubo de basura, vamos, digo yo.

Pero, ¡por el amor de Dios! no se cansa esta mujer de la misma conversación. Señora, por favor dese prisa, que el contenedor estará ahí todo el día pero yo, ¡yo voy a llegar tarde!.


miércoles, 9 de diciembre de 2009

GRACIAS J.V.

Empecé el blog para escribir sobre esas cosas curiosas que me suelen pasar. De las que me suelo reír ironizando, sancándole una punta sárcastica-graciosa. Pero, por caprichos de la vida, lo he empezado en un momento en el que me están pasando cosas de todo menos curiosas o graciosas. Y las entradas del blog están adquiriendo otra esencia. La esencia que ahora mismo me embarga.


Llevo varios días con ganas de escribir. Pero estoy en ese punto en el que todo está dentro y no hay forma de sacarlo. En el punto en el que no salen las palabras y se van agolpando una tras otra, como coches que se aglomeran en un atasco en hora punta. Con todas las ganas de gritar, pero no sale la voz. Con todas las ganas de llorar pero no asoman las lágrimas. Me siento parada y estática. Con miedo a dar un paso, porque nose donde darlo: ¿hacia delante? ¿hacia atrás? ¿cambio de camino y giro? ¿a la izquierda o a la derecha?.


Anoche, hablando con un amigo, llegué a un punto de inflexión. La relación que tengo con él es difícil de explicar. Pese a mi asombro, es la única persona en este mundo que me hace ver más allá de las cosas tangibles (cosa que no sabéis como me cuesta). Y como era de esperar, sobrepasé ese punto y todo explotó en mí, y todo salió. Se acabó el atasco de palabras, se cayó el dique que paraba las lágrimas y grité. Y aunque fuera por un momento, toda la tormenta que llevaba por dento se calmó.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

CANSADA

Cansado. ¡Sí! Cansado de usar un solo bazo, dos labios,veinte dedos, no sé cuántas palabras, no sé cuantos recuerdos,grisáceos, fragmentarios. Cansado, muy cansado de este frío esqueleto, tan púdico, tan casto, que cuando se desnude no sabrá si es el mismo que usé mientras vivía. Cansado.¡ Sí! Cansadopor carecer de antenas, de un ojo en cada omóplato y de una cola auténtica, alegre desatada, y no este rabo hipócrita, degenerado, enano. Cansado, sobre todo, de estar siempre conmigo, de hallarme cada día, cuando termina el sueño, allí, donde me encuentre,con las mismas narices y con las mismas piernas; como si no deseara esperar la rompiente con un cutis de playa, ofrecer, al rocío, dos senos de magnolia,acariciar la tierra con un vientre de oruga, y vivir, unos meses, adentro de una piedra.
Oliverio Girondo, "Cansancio".

viernes, 27 de noviembre de 2009

EL LUNES....

Tengo que empezar un proyecto de una maldita asignatura que me tiene de los nervios. Llevo tres semana diciendo: el lunes empiezo el proyecto de control automático.


Tengo que empezar a repasar una asignatura, que me presenté en septiembre y suspendí, y que ahora me presento en diciembre: Llevo una semana diciendo: El lunes tengo que ponerme con trasmisión de calor.


Quiero adelgazar unos 5-7Kg, llevo unos tres años diciendo: A partir de la semana que viene tengo que controlar lo que como un poco, se acabaron los atracones de macarrones con queso, y los hartones de cerveza cuando salgo.


Quiero comprarme unas botas marrones, llevo unas semanas dicendo: de la semana que viene no pasa!.


Llevo mucho tiempo diciéndome a mi misma: tengo que cambiar, tengo que olvidarme de cosas que no me hacen bien, tengo que reestructurar mi vida, ordenarla; tengo que dejar de fustigarme por las cosas que ya no puedo cambiar, por las cosas que ya no tienen solución e intentar corregir las futuras. Tengo que cambiar de actitud ante la vida, dejar de esconderme en mi habitación y dedicarle tiempo, tanto a las cosas que ahora mismo son mi prioridad como a las personas que ahora mismo necesito y quiero tener a mi lado. Pero como el proyecto, el examen, el control de la comida o las botas.... es algo que he dejado para el luenes de la semana que viene.


P.D. Esto se lo quiero dedicar a una chavalita que he conocido muy recientemente. Aina, si lees esto, quiero que te sirva un poco: No dejes tus cosas también para el lunes, no vaya que cuando llegue ese "lunes" sea un poco tarde y te des cuenta de los momentos que has podido dejar pasar y de las personas que has podido perder en el camino ;).


martes, 24 de noviembre de 2009

¡MUCHAS FELICIDADES!

Te quiero decir que eres una de las personas que más me importa en esta vida, sino eres la que más. Lo sé porque siempre estás ahí, porque confío en tí sobre todas las cosas. Lo sé porque eres la persona a la que más me duele decepcionar. Una mala mirada o una mala palabra tuya hacia mí me hiere más que nada en este mundo.
Te quiero decir que eres la primera persona que se me viene a la cabeza cuando tengo que dar una buena noticia, cuando algo me preocupa y necesito contarlo, cuando tengo una pregunta,...

Te quiero decir que me duele mucho saber que no he sido la persona que tú pensabas que era. No soy todo lo inteligente y madura que tu hubieras esperado. Creo que habías puesto muchas esperanzas en mí y, que tal vez, me habías sobrevalorado. Y de un tiempo aquí te he ido defraudando día a día.
Te quiero decir que ojalá tu caracter introvertido no fuera barrera para decirme todo lo que piensas. Porque, algunas veces, creo tener que averiguar yo si algo no va bien. Me siento impotente viendo que no puedo hacer nada, pero no porque no esté en mis manos, sino porque no me dejas.
Por todo esto y porque sé lo que te desvives por los tuyos, te quiero decir algo que, quizás, nunca te haya dicho: "te quiero muchísimo".

viernes, 6 de noviembre de 2009

MENUDA GENTE

Aunque actualmente estudio, de vez en cuando hago trabajos temporales como azafata y promotora. Ahora llevo ya más de un mes trabajando en degustaciones de un licor por diversos restaurantes. Hoy me ha tocado en el restarurante más "cool" y con más "caché" de todos los que por ahora llevo, unos platos supercarísimos ( 30, 40...hasta 60 € un platito), un protocolo impresionante y un servicio exquisito. Pero, ¿sabéis qué?, ha sido el restaurante de todos los que llevo en el que me he sentido más incomoda. Y no incómoda por el personal de allí, no, no; incómoda por los comensales: "no había visto tanta persona impertinente reunida en mi vida"....


Llego y había dos mesas que ya habían terminado de comer, es en ese momento cuando empieza mi trabajo. Me acerco para comentarles que estamos de promoción de un licor y que estamos ofreciendo chupitos o copas. La primera mesa de 5 personas me dice: " No, no, no bebo vino". A ver señora, es un licor, no es vino, un pequeño chupito que actúa como digestivoooo.... . La segunda mesa a la que me acerco me dice: " No, yo paso".


La cosa no acaba aquí, había otra mesa de unas 6 personas, dirigidas todas por el cabeza de familia, que en este caso era el abuelo. El abuelo se quejó por todo: primero se quejó porque no quería que le pusieran más entrantes, entrantes que él mismo había pedido; después se quejó porque algo no estaba en su punto, en el punto que le gusta a él; después se quejó porque había pedido una tapa, no un plato; después se quejó porque la tapa era muy pequeña, que no podía encontrar las espinacas decía; lo llamaron por teléfono y no hablaba.... ¡¡berreaba!!; y para colmo de los colmos se le metió en el "moño" que tenía que fumar un puro en un lugar que de hecho que estaba prohibido fumar.


Y yo me hago una pregunta, ¿por qué la gente bien posicionada son tan arrogantes, impertinentes, estúpidos,.....? ¿Por qué hablaban con esa superioridad a los camareros, y tenían esa impaciencia con ellos? Os lo prometo, hace poco trabajé en una tasquilla del centro de Sevilla y estuve la mar de agusto, la gente participaba en la degustación, y me trataron superbien, y se comía con servilleta de papel, sin mantel y tenías que ir tu a pedir en la barra. Pues ,estos sitios son en los que mejor me siento, tanto como promotora como clienta......